En abril, la percepción pesimista de las ventas disminuyó 6,2 p.p frente al mes anterior
La muestra utilizada para el boletín de abril 2023, se distribuyó en los sectores económicos de la siguiente manera: 48,9 % servicios, 32,4 % comercio, 17,6 % industria y 1,1 % al sector agropecuario y minero.
Por tamaño empresarial, el 97,9 % de la muestra fueron microempresas, el 1,9 % pequeñas empresas y el 0,2 % medianas; y del total, el 64,8 % fue liderado por mujeres, mientras que el restante 35,2 %, por hombres.
Por otra parte, el 16,0 % de los empresarios contó con un local propio para el desarrollo de su actividad comercial, 78,2 % se ubicó bajo la modalidad de arrendamiento, 4,9 % no requirió de un local para la ejecución de su actividad, y el restante 0,9 %, utilizó otras modalidades de contratación de locales comerciales (usufructo o préstamo, entre otras).
La encuesta por localidades estuvo encabezada por Suba con 15,2 %, seguida por Engativá 13,0 %, Kennedy 10,7 %, Usaquén 9,4 % y Bosa 6,7 %. Estas cinco localidades consolidaron el 55,0 % del total de las encuestas realizadas en el mes, el otro 45,0 %, se distribuyó entre las catorce localidades urbanas restantes. Es pertinente resaltar que 9,2 % de las empresas encuestadas tienen una vocación de servicios y se ubicaron en la localidad de Suba y el 7,4 % en Engativá; mientras que el 4,1 % con vocación comercial se ubicó en Suba y el 3,8 % en Engativá. En cuanto a la vocación industrial, se destacaron las localidades de Kennedy y Engativá con una participación en el total de empresas encuestadas de 2,8 % y 1,8 %, respectivamente.
Se identificó que las localidades con la mayor fuerza laboral al inicio del mes de abril fueron: Engativá con 14,0 %, Suba con 13,8 %, Usaquén con 11,4 %, Kennedy con 9,0 % y Puente Aranda con 6,8 %.
En abril, el movimiento de la fuerza laboral, en las empresas encuestadas, fue casi inexistente, pues se contabilizaron sólo 2 contrataciones y 3 despidos. De esta manera, se evidenció una disminución neta de 0,04 % en la cantidad de trabajadores de las empresas encuestadas.
Por otra parte, en este mes sólo en cinco localidades la participación de la mujer en la fuerza laboral fue inferior a la de los hombres: Los Mártires 38,3 %, Ciudad Bolívar 45,2 %, Puente Aranda 43,6 %, Antonio Nariño 42,8 % y Tunjuelito 42,2 %; mientras que, en localidades como Usme, Santa Fe, Kennedy, Fontibón y Rafael Uribe Uribe la participación de la mujer en la fuerza laboral fue superior o igual al 60,0 %. En el total de empresas encuestadas, la participación de la mujer en el empleo fue de 53,0 %, 0,3 puntos porcentuales (p.p.) menos que en marzo, en parte resultado de la disminución de las mujeres empleadas en la localidad de Bosa.
En general, el empleo de las mipyme encuestadas se mantuvo estable y las contrataciones se dieron en otras actividades manufactureras (4,3 %), mientras que los despidos se identificaron en actividades de servicios de comidas y bebidas (-0,4 %). Por tamaño empresarial, la participación de las microempresas en el total del empleo fue 84,3 %, mientras que en las empresas pequeñas fue 12,9 % y en las medianas de solo 2,8 %.
Para el mes de análisis, el 92,9 % de las empresas contactadas se encontraba operando. El 62,5 % de estas, utilizó más del 50,0 % de su capacidad productiva y el 37,5 % restante, lo hizo utilizando el 50,0 % o menos.
El 5,2 % de los establecimientos encuestados implementó el teletrabajo como una de sus modalidades de trabajo; de este porcentaje, el 51,9 % lo incorporó en más del 50,0 % de su fuerza laboral y, el 48,1 % restante, lo instauró en menos del 50,0 % de su personal.
El 31,5 % de las mipyme encuestadas, reportó un valor de ventas diarias inferiores a $500.000, el 12,1 % entre $500.001 y $1.000.000, el 5,0 % entre $1.000.001 y $3.000.000 y el 0,9 % registró ventas superiores a $3.000.000. Adicionalmente, el 9,5 % consideró que sus ventas fueron mayores que las reportadas en el mismo mes del año anterior, el 51,9 % manifestó que se mantuvieron iguales, y el 38,6 %, las percibieron inferiores (6,2 p.p menos frente al mes anterior).
En abril, el 60,6 % de los empresarios de la muestra consideraban que la principal dificultad que enfrentaban sus negocios eran las bajas ventas, seguida por los altos costos de producción 12,2 %, la competencia 6,8 %, los altos costos de funcionamiento 3,5 %, el valor inicial de la inversión 3,2 %, y el transporte 0,4 %. Finalmente, el 5,6 % indicó que ninguna de estas dificultades lo afectó, pues consideraron que su actividad se desarrolló normalmente y sin contratiempos.
Para el 11,1 % de las empresas consultadas, el principal obstáculo que enfrentaron las mipyme en cuanto al manejo del inventario, fue el incremento de los costos, seguido por la baja estimación en la proyección de ventas 5,1 %, la falta de recursos para surtir 3,4 %, y el incumplimiento de los proveedores 1,0 %. Es pertinente resaltar que el 78,8 % de las empresas, consideraron que no tienen ningún tipo de dificultad con el manejo del inventario.
Por otra parte, del total de las mipyme encuestadas, el 84,1 % no ofreció el servicio a domicilio para comercializar sus productos, mientras que el 14,0 % prestó el servicio a través de domiciliarios propios y el 3,4 % lo hizo por medio de plataformas digitales de envíos, como Rappi, Ifood, Mercado Libre, Uber Eats, entre otras.
Asimismo, el 6,8 % de las mipyme consultadas en abril, accedieron efectivamente a créditos del sector financiero, a su vez, al 1,2 % le negaron sus solicitudes y el 92,0 % no solicitó créditos. Dentro de las razones por las cuales las solicitudes de crédito fueron negadas se encontraron: capacidad de pago insuficiente 25,0 %, no cumplir con la documentación requerida 25,0 %, reportes negativos en centrales de riesgo 25,0 %, deterioro en las condiciones de la empresa 8,3 % y otras razones 16,7 %.
El porcentaje de aprobación de las solicitudes de crédito de los micro, pequeños y medianos empresarios encuestados fue de 85,0 %, en parte motivado por la campaña del sistema financiero para aumentar la bancarización y el aprovechamiento de las altas tasas de interés.
El 46,2 % de los empresarios llevó personalmente la contabilidad, el 34,8 % no llevó contabilidad, el 5,3 % contrató los servicios de un contador, el 13,8 % contó con un contador interno y el 3,0 % manejó un libro diario de registro de sus operaciones.
Con el flujo de caja actual, el 46,4 % de los empresarios informaron que pueden cumplir con el pago oportuno de impuesto de industria y comercio (ICA), el 43,4 % con el impuesto al valor agregado IVA (31,7 % no son responsables del pago de IVA), el 87,0 % con la renovación de Cámara de Comercio de Bogotá (CCB), y el 42,2 % con el impuesto predial (49,5 % no deben pagar impuesto predial).
Respecto al pago de nómina de empleados, el 79,2 % de los encuestados comunicaron que pueden hacerse cargo de esta obligación, sin embargo, el 20,8 % reveló que no pueden asumir la obligación.
El 69,5 % de las unidades productivas consideraron que lograrán atender su compromiso económico por concepto de arrendamiento en el próximo mes, el 13,4 % no lo podrán hacer y el 17,1 % restante no paga arriendo.
El 88,2 % de las empresas reportaron que conseguirían hacerse cargo del pago de los servicios públicos del siguiente mes, en contraste, el 11,8 % consideró que no será posible realizarlo.
Durante el mes de abril, 48,4 % de los empresarios emplearon internet para hacer uso de aplicaciones, 34,6 % para revisar el correo electrónico, 32,9 % para realizar transacciones financieras, 20,3 % para mensajería instantánea, 20,3 % para la venta a clientes, 18,6 % para efectuar pedidos a proveedores, 17,8 % para buscar información de bienes y servicios, 10,9 % para capacitación de personal, 10,3 % para recreación y entretenimiento y 47,4 % informó que no hizo uso del internet en su negocio. Cabe aclarar que los diferentes usos no son excluyentes entre sí.
Dentro de las opciones digitales para recibir pagos, los empresarios identificaron las plataformas de recaudo como la opción preferida con un 36,9 %, seguida por las transferencias bancarias con un 31,9 %, las billeteras electrónicas con 12,8 % y la utilización del código QR con 0,4 %.
Frente a los medios físicos de pago, el efectivo siguió siendo la opción más utilizada con 92,9 %, luego las tarjetas de débito con 10,6 % y, por último, las tarjetas de crédito con 10,4 %. Es necesario mencionar que, la elección de los medios de pago (electrónico o físico) no es excluyente, pues hacen parte de un portafolio de servicios al alcance de los clientes.
En cuanto a la exhibición de la marca y sus productos, la red social con mayor participación en las empresas encuestadas fue Facebook con una cobertura de 25,5 %, seguido de Instagram con 19,6 %, LinkedIn con 3,7 %, Twitter con 3,2 %, YouTube con 0,8 %, y otras como página web propia o WhatsApp, alcanzaron una incidencia de 15,8 %; sin embargo, el 65,2 % de las empresas consultadas no tienen una cuenta en redes sociales para el desarrollo de su actividad comercial. Es relevante indicar que el uso de una red social no excluye el uso de las demás.
En cuanto al uso de tecnologías avanzadas y emergentes, el 3,1 % de los empresarios encuestados reportaron haber invertido, entre $1.000.000 y $10.000.000, en estas tecnologías en el último año; el 0,7 % entre $10.000.000 y $50.000.000; y el 0,7 % más de $50.000.000. El 95,5 % restante, no realizaron inversiones en tecnología avanzada y emergente para el desarrollo de su actividad.
El 1,0 % de las empresas consultadas en abril, implementaron tecnología de inteligencia de negocios para evaluar, optimizar o coordinar operaciones internas de producción o funcionamiento; mientras que el 0,7 % contó con tecnología de analítica de negocios1, la cual utiliza para anticipar tendencias y resultados; y el 0,1 % utilizó la inteligencia artificial para realizar minería de datos2.
Por último, 0,4 % de los encuestados informaron que cuentan con infraestructura basada en la nube o en tecnología de control numérico (cloud computing3, internet de las cosas4 y software con servidor en la nube, entre otras) para su empresa.
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1. El análisis de datos convierte datos sin procesar en información práctica. Incluye una serie de herramientas, tecnologías y procesos para encontrar tendencias y resolver problemas mediante datos. Los análisis de datos pueden dar forma a procesos empresariales, mejorar la toma de decisiones e impulsar el crecimiento empresarial.
2. La minería de datos es el proceso de hallar anomalías, patrones y correlaciones en grandes conjuntos de datos para predecir resultados. Empleando una amplia variedad de técnicas, puede utilizar esta información para incrementar sus ingresos, recortar costos, mejorar sus relaciones con clientes, reducir riesgos y más.
3. Cloud computing es la disponibilidad bajo demanda de recursos de computación como servicios a través de Internet. Esta tecnología evita que las empresas tengan que encargarse de aprovisionar, configurar o gestionar los recursos y permite que paguen únicamente por los que usen. Hay tres tipos de modelos de servicio de cloud computing: infraestructura como servicio ofrece servicios de computación y almacenamiento, plataforma como servicio proporciona un entorno de desarrollo y despliegue para crear aplicaciones en la nube y software como servicio facilita aplicaciones como servicios.
4. El término IoT, o Internet de las cosas, se refiere a la red colectiva de dispositivos conectados y a la tecnología que facilita la comunicación entre los dispositivos y la nube, así como entre los propios dispositivos. Un sistema común de IoT funciona mediante la recopilación y el intercambio de datos en tiempo real.
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- La participación de la mujer en el empleo de las mipyme fue de 53,0 %, 0,3 puntos porcentuales (p.p) menos que en marzo.
- El 31,5 % de las mipyme encuestadas, reportaron ventas diarias inferiores a $500.000.
- En abril, el 12,2 % de los empresarios consideraron que los altos costos de producción son la principal dificultad de sus negocios.