El 51,4 % de las mipyme consideró que la principal dificultad que enfrentaron sus negocios fueron las bajas ventas
La muestra utilizada para el boletín del mes de agosto 2023 se distribuyó en los sectores económicos de la siguiente manera: 48,9 % servicios, 32,4 % comercio, 17,6 % industria y 1,1 % al sector agropecuario y minero.
Por tamaño empresarial, el 98,0 % de la muestra fueron microempresas, el 1,8 % pequeñas empresas y el 0,2 % medianas; y del total, el 71,3 % fue liderado por mujeres, mientras que el restante 28,7 %, por hombres.
De otra parte, el 16,0 % de los empresarios contó con un local propio para el desarrollo de su actividad comercial, 80,9 % se ubicó bajo la modalidad de arrendamiento, 2,7 % no requirió de un local para la ejecución de su actividad, y el restante 0,4 %, utilizó otras modalidades de contratación de locales comerciales (usufructo o préstamo, entre otras).
La encuesta por localidades estuvo encabezada por Suba con 14,7 %, seguida por Engativá 11,2 %, Kennedy 10,7 %, Usaquén 7,2 % y Bosa 6,7 %; estas cinco localidades consolidaron el 50,5 % del total de las encuestas realizadas en el mes, el otro 49,5 %, se distribuyó entre las catorce localidades urbanas restantes. Es pertinente resaltar que 8,3 % de las empresas encuestadas tienen una vocación de servicios y se ubicaron en la localidad de Suba y el 5,9 % en Engativá; mientras que el 4,0 % con vocación comercial se ubicó en Suba y el 3,8 % en Kennedy. En cuanto a la vocación industrial, se destacaron las localidades de Suba y Kennedy con una participación en el total de empresas encuestadas de 2,1 % y 2,0 %, respectivamente.
Se identificó que las localidades con mayor fuerza laboral al inicio del mes fueron: Suba con 16,6 %, Engativá con 12,4 %, Usaquén con 11,4 %, Kennedy con 9,6 % y Puente Aranda con 8,1 %.
En agosto, el reporte de contratados superó al de despidos en las empresas encuestadas, pues se realizaron 21 contrataciones y 20 despidos. De esta manera, la variación porcentual neta del mes no fue significativa.
El balance general del empleo de las mipyme encuestadas se mantuvo constante, debido a un aumento en las contrataciones que se contrarrestó con los despidos reportados en el mes; la contratación se dio en obras de ingeniería civil (12,5 %) y construcción de edificios (13,8 %), mientras que los despidos se identificaron en actividades veterinarias (-53,8 %) y fabricación de productos textiles (-8,0 %). Por tamaño empresarial, la participación de las microempresas en el total del empleo fue 87,3 %, mientras que en las empresas pequeñas fue 8,0 % y en las medianas de solo 4,7 %.
En solo 4 de las 19 localidades urbanas de Bogotá la participación de las mujeres en la fuerza laboral fue inferior a la de los hombres: Engativá 44,8 %, Suba 44,2 %, La Candelaria 36,4 % y Barrios Unidos 34,1 %; caso contrario al de localidades como San Cristóbal, Usme, Antonio Nariño, Chapinero y Ciudad Bolívar, donde la participación de las mujeres fue superior al 65,0 % de la fuerza laboral. En el total de empresas encuestadas, la participación de las mujeres en el empleo fue de 52,2 %, 2,2 puntos porcentuales (p.p.) más que en julio de 2023.
Para el mes de análisis, el 95,1 % de las empresas contactadas se encontraba operando. El 64,7 % de estas utilizó más del 50,0 % de su capacidad productiva y el 35,3 % restante, lo hizo utilizando el 50,0 % o menos.
El 4,1 % de los establecimientos encuestados implementó el teletrabajo como una de sus modalidades de trabajo; de este porcentaje, el 58,5 % lo incorporó en menos del 50,0 % de su fuerza laboral y, el 41,5 % restante, lo instauró en más del 50,0 % de su personal.
El 35,6 % de las mipyme encuestadas, reportó un valor de ventas diarias inferiores a $500.000, el 10,3 % entre $500.001 y $1.000.000, el 3,6 % entre $1.000.001 y $3.000.000 y el 5,8 % registró ventas superiores a $3.000.000. Adicionalmente, el 8,9 % consideró que sus ventas fueron mayores que las reportadas en el mismo mes del año anterior, el 53,2 % manifestó que se mantuvieron iguales, y el 37,9 %, las percibieron inferiores (5,0 p.p. más frente al mes anterior).
Para el periodo de análisis, el 51,4 % de los empresarios consideraban que la principal dificultad que enfrentaban sus negocios eran las bajas ventas, seguida por los altos costos de producción 12,9 %, la competencia 6,3 %, el valor de la inversión inicial 4,6 %, los altos costos de funcionamiento 2,4 % y el transporte 0,4 %. Finalmente, el 7,0 % indicó que ninguna de estas dificultades lo afectó, pues consideraron que su actividad se desarrolló de forma normal y sin contratiempos.
Para el 9,9 % de las empresas consultadas, el principal obstáculo que enfrentaron las mipyme en cuanto al manejo del inventario, fue la baja estimación en la proyección de las ventas, seguida por el incremento en los costos 9,5 %, la falta de recursos para surtir 4,3 % y el incumplimiento de los proveedores 0,5 %. Es pertinente resaltar que el 75,4 % de las empresas, consideraron que no tienen ningún tipo de dificultad con el manejo del inventario.
Por otra parte, del total de las mipyme encuestadas, el 81,4 % no ofreció el servicio a domicilio para comercializar sus productos, mientras que el 16,8 % prestó el servicio a través de domiciliarios propios y el 3,4 % lo hizo por medio de plataformas digitales de envíos, como Rappi, Ifood, Mercado Libre, Uber Eats, entre otras.
Asimismo, el 5,3 % de las mipyme consultadas en el mes de agosto, accedieron efectivamente a créditos del sector financiero, a su vez, al 0,5 % le negaron sus solicitudes y el 94,2 % no solicitó créditos.
Dentro de las razones por las cuales las solicitudes de crédito fueron negadas se encontraron: no cumplir con la documentación requerida y reportes negativos en centrales de riesgo con un 40,0 %, cada una, y la capacidad de pago insuficiente con el 20,0 % restante. El porcentaje de aprobación de las solicitudes de crédito de los micro, pequeños y medianos empresarios encuestados fue de 91,4 %.
El 51,5 % de los empresarios llevó personalmente la contabilidad, el 25,3 % no llevó contabilidad, el 19,1 % tuvo un contador interno, el 6,3 % contrató los servicios de un contador externo y el 1,3 % manejó un libro diario de registro de sus operaciones.
Con el flujo de caja actual, el 47,8 % de los empresarios informaron que pueden cumplir con el pago oportuno del impuesto de industria y comercio (ICA), el 56,4 % con el impuesto al valor agregado (IVA) (26,7 % no son responsables del pago de IVA), el 86,8 % con la renovación de Cámara de Comercio de Bogotá (CCB), y el 45,1 % con el impuesto predial (49,9 % no deben pagar impuesto predial).
Respecto al pago de la nómina de empleados, el 80,0 % de los encuestados comunicaron que pueden hacerse cargo de dicha obligación, sin embargo, el 20,0 % reveló que no pueden asumirla.
El 71,9 % de las unidades productivas consideraron que lograrán atender su compromiso económico por concepto de arrendamiento en el próximo mes, el 11,4 % no lo podrán hacer y el 16,7 % restante no paga arriendo.
El 92,2 % de las empresas reportaron que conseguirían hacerse cargo del pago de los servicios públicos del siguiente mes, en contraste, el 7,8 % consideró que no será posible realizarlo.
Durante el mes de agosto, 50,0 % de los empresarios emplearon internet para hacer uso de aplicaciones, 29,4 % para revisar el correo electrónico, 23,6 % para realizar transacciones financieras, 18,3 % para la venta a clientes, 15,8 % para mensajería instantánea, 12,6 % para buscar información de bienes y servicios, 12,3 % para efectuar pedidos a proveedores, 9,8 % para recreación y entretenimiento, 7,6 % para capacitación del personal y 47,0 % informó que no hizo uso del internet en su negocio. Cabe aclarar que los diferentes usos no son excluyentes entre sí.
Dentro de las opciones digitales para recibir pagos, los empresarios identificaron las plataformas de recaudo como la opción preferida con un 50,2 %, seguida por las transferencias bancarias con un 22,3 %, las billeteras electrónicas con 15,2 % y la utilización del código QR con 3,3 %.
Frente a los medios físicos de pago, el efectivo siguió siendo la opción más utilizada con 95,3 %, luego las tarjetas de débito con 14,2 % y, por último, las tarjetas de crédito con 9,8 %. Es necesario mencionar que, la elección de los medios de pago (electrónico o físico) no es excluyente, pues hacen parte de un portafolio de servicios al alcance de los clientes.
En cuanto a la exhibición de la marca y sus productos, la red social con mayor participación en las empresas encuestadas fue Facebook con una cobertura de 31,2 %, seguido de Instagram con 26,4 %, X (antes Twitter) con 6,3 %, LinkedIn con 4,2 %, YouTube con 1,5 %, y otras como página web propia o WhatsApp, alcanzaron una incidencia de 23,9 %; sin embargo, el 56,2 % de las empresas consultadas no utilizaron redes sociales para el desarrollo de su actividad comercial. Es relevante indicar que el uso de una red social no excluye el uso de las demás.
En cuanto al uso de tecnologías avanzadas y emergentes, el 0,8 % de los empresarios encuestados reportaron haber invertido en estas entre $1.000.000 y $10.000.000 en el último año; el 0,1 % entre $10.000.000 y $50.000.000; y el 0,4 % más de $50.000.000 y el 98,7 % restante, no realizaron inversiones en tecnología avanzada y emergente para el desarrollo de su empresa.
El 0,2 % de las empresas consultadas implementaron tecnología de analítica de negocios1 para anticipar tendencias y resultados; mientras que el 0,6 % contó con tecnología de inteligencia de negocios para evaluar, optimizar o coordinar operaciones internas de producción o funcionamiento; y el 0,2 % utilizó la inteligencia artificial para realizar minería de datos2.
Por último, 0,3 % de los encuestados informaron que cuentan con infraestructura basada en la nube o en tecnología de control numérico (cloud computing3, internet de las cosas4 y software con servidor en la nube, entre otras) para su empresa.
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1. El análisis de datos convierte datos sin procesar en información práctica. Incluye una serie de herramientas, tecnologías y procesos para encontrar tendencias y resolver problemas mediante datos. Los análisis de datos pueden dar forma a procesos empresariales, mejorar la toma de decisiones e impulsar el crecimiento empresarial.
2. La minería de datos es el proceso de hallar anomalías, patrones y correlaciones en grandes conjuntos de datos para predecir resultados. Empleando una amplia variedad de técnicas, puede utilizar esta información para incrementar sus ingresos, recortar costos, mejorar sus relaciones con clientes, reducir riesgos y más.
3. Cloud computing es la disponibilidad bajo demanda de recursos de computación como servicios a través de Internet. Esta tecnología evita que las empresas tengan que encargarse de aprovisionar, configurar o gestionar los recursos y permite que paguen únicamente por los que usen. Hay tres tipos de modelos de servicio de cloud computing: infraestructura como servicio ofrece servicios de computación y almacenamiento, plataforma como servicio proporciona un entorno de desarrollo y despliegue para crear aplicaciones en la nube y software como servicio facilita aplicaciones como servicios.
4. El término IoT, o Internet de las cosas, se refiere a la red colectiva de dispositivos conectados y a la tecnología que facilita la comunicación entre los dispositivos y la nube, así como entre los propios dispositivos. Un sistema común de IoT funciona mediante la recopilación y el intercambio de datos en tiempo real.
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- En agosto, la participación de las mujeres en el empleo de las mipyme fue de 52,2 %, 2,2 puntos porcentuales (p.p.) más que en el mes de julio.
- El 35,6 % de las mipyme encuestadas, reportó un valor de ventas diarias inferiores a $500.000, el 10,3 % entre $500.001 y $1.000.000.
- En el octavo mes de 2023, el 8,5 % de los empresarios consideraron que la baja estimación en la proyección de ventas es la principal dificultad en la rotación de sus inventarios.