Durante el primer trimestre de 2012, el área para vivienda nueva en Bogotá creció en 54,4%
Las licencias de construcción en Bogotá reflejan la aplicación de la norma sismoresistente
El área licenciada para edificaciones disminuyó 52% en los primeros cuatro meses de 2012, respecto al mismo periodo de 2011, al pasar de 2.338.911 m2 a 1.121.578m2. Este resultado se explica principalmente por la implementación de la Norma de Sismoresistencia (NSR-10), la cual hizo que gran parte de los proyectos de vivienda radicados en las curadurías en 2010 fueran aprobados de manera “extraordinaria” entre finales de dicho año y comienzos de 2011. Este hecho distorsionó las estadísticas de licencias como indicador del sector de la construcción en la ciudad y el país, lo cual se evidencia al comparar el área que inició proceso de construcción y el área licenciada, la cual está rezagada dos trimestres. Esto teniendo en cuenta que el tiempo promedio transcurrido entre la aprobación de la licencia y el inicio de la obra, oscila entre 7 y 9 meses en Bogotá (Gráfico 1).
En este sentido, la norma de sismo resistencia llevó a que muchos constructores solicitaran los permisos de manera anticipada, evitando la aplicación de la medida en sus nuevos proyectos de vivienda y para así impedir un incremento en sus costos. Lo anterior dado que el reglamento obliga a los constructores a cumplir con un paquete de medidas en relación con las calidades específicas de los materiales que se utilizan en edificios y viviendas, con el fin de prevenir eventuales desastres.
El área nueva construida y los créditos para vivienda registraron un crecimiento real
Según los resultados de la actividad real, medidos a través del Censo de Edificaciones del Dane, el área para vivienda nueva en Bogotá, que inició construcción, aumentó 54,4% en el primer trimestre de 2012. Esto, en relación con lo registrado un año atrás, cuando este indicador cayó cerca del 30%, superando los 950 mil metros cuadrados (Gráfico 2).
Por su parte, la financiación de vivienda creció en términos reales 3,3%, entre enero y marzo de 2012, con respecto al mismo periodo del año anterior, al pasar de $625.642 a $645.417 millones. Es importante precisar que si bien el valor de los créditos entregados por las entidades financieras en Bogotá registra un comportamiento estacional a lo largo de cada año, es un buen indicador sectorial, en la medida que refleja el desempeño no sólo de la vivienda nueva, sino también de la usada.
Las ventas de vivienda superaron las 18 mil unidades entre enero y abril
De acuerdo con la información generada por la firma La Galería Inmobiliaria para la Secretaría Distrital de Hacienda, en Bogotá las ventas de vivienda nueva sobre planos, culminada o en construcción, durante los primeros cuatro meses de 2012 ascendieron a 18.378 unidades. Esto quiere decir, 1.367 viviendas menos que las registradas un año atrás, cuando dichas ventas alcanzaron una cifra récord en los últimos ocho años (19.745 unidades).
La disminución en las ventas de vivienda se registró en todos los segmentos, aunque en mayor proporción en Vivienda de Interés Prioritario (VIP) con una variación negativa del 24,2%. La vivienda distinta a la VIS disminuyó en 755 unida-des (-9,4%), mientras que la vivienda social (VIS), reportó cerca de 600 unidades menos vendidas (-5,2%). (Gráfico 3).
A pesar de lo anterior, la oferta de vivienda nueva, entendida como el stock de unidades disponibles para la venta en la ciudad, permaneció en un nivel similar al de 2011 (17.978 viviendas). El resultado tanto de las ventas como de la oferta, se sintetiza en el indicador de rotación, el cual mide el número de meses que se demoraría en comercializarse el inventario o stock con base en las ventas del periodo. Dicho indicador pasó de 3,4 meses en 2011 a 3,9 meses a abril de 2012.
Los costos de construir vivienda crecen a un mayor ritmo que los arrendamientos
Al comparar los precios de los arrendamientos con los costos en términos reales, es decir descontando el factor inflacionario (IPC total) en lo corrido del año, se observa que a abril de 2012 los costos de construir vivienda aumentaron en Bogotá más que los cánones de arrendamiento (1,7% y 0,4%, respectivamente). El crecimiento de los costos de vivienda se explica principal-mente por los precios de los materiales para cimentación y estructuras (específicamente concreto), mano de obra (ayudantes y oficiales) y materiales de mampostería (ladrillo y morteros).
Por su parte, los precios de vivienda nueva en la ciudad registraron un importante aumento (10,3%) en el primer trimestre de 2012, respecto a 2011. Este resultado es cercano al observado en 2010 (10,9%) y muestra la persistencia al alza de los precios de vivienda, como lo ha indicado recientemente ANIF, señalando que las de alzas en los precios de la vivienda nueva se encuentran un 30% real por encima de su media histórica.
De acuerdo con el censo de edificaciones del Dane, el área que inició proceso de construcción aumentó 48,7% en el primer trimestre de 2012 para el conjunto de las edificaciones y 54,4% en el caso de la vivienda en la capital del país. A pesar de esto, las ventas de vivienda nueva, que dan cuenta las perspectivas futuras del sector, cayeron 6.9%. Para el análisis de las perspectivas del sector, es pertinente analizar prioritariamente el censo de edificaciones. Esto, dado que la aplicación de la norma sismoresistente generó un aumento extraordinario en la expedición de licencias de construcción, y por consiguiente, una distorsión que no permite que este indicador de cuenta exacta del crecimiento de sector.
En el primer trimestre de 2012 iniciaron construcción cerca de 410 mil metros cuadrados más que los registrados en el mismo periodo de 2011. Entre enero y abril de 2012 se aprobó la construcción de 8.454 unidades, mientras que en 2011 se licenciaron 20.785 viviendas. Este “boom†es producto de la aplicación de la norma sismoresistente (NSR -2010). En el primer trimestre del año, los créditos desembolsados para vivienda nueva aumentaron un 3.3% en términos reales. A abril de 2012, las ventas de vivienda disminuyeron 8,1%, principalmente por las disminuciones en la venta de vivienda diferente a VIS.