Baja oferta de frutas y tubérculos inciden en la inflación de Bogotá

En marzo baja oferta de frutas y tubérculos explican la inflación

La inflación en marzo de este año para la ciudad de Bogotá fue 0.34%, cifra superior a la registrada en el mismo período del año 2013 (0.26%). Además, la variación del índice es inferior 0.05 puntos porcentuales (p.p.,) al registrado a nivel nacional (0.39%).

El comportamiento de la inflación en marzo en el Distrito Capital fue influenciada por un ajuste en los precios del grupo vivienda de 0.39% y del grupo alimentos, 0.38%.

En orden de importancia, en el grupo vivienda la variación general se vio influenciada por el alza de precios en los subgrupos de gasto de ocupación y gas y servicios públicos. En el primero, los arrendamientos alcanzaron aumentos mensuales de 0.28%, incidido por los ajustes de inicio de año en los cánones de arrendamiento.

Por otra parte, el alza de 4.97% en las tarifas de gas domiciliario incidieron en un mayor costo de vida en el grupo de vivienda. A modo de contextualización, en marzo el precio del cilindro de gas propano aumentó 1.6% y quedó establecido en 44 mil pesos (33 Lb). El alza la impuso Ecopetrol a los distribuidores, argumentando aumentos de los precios internacionales del petróleo.

Por su parte, el grupo alimentos también presentó variaciones de precios positivas en marzo. La incidencia de los precios en las frutas, los tubérculos y las comidas en restaurantes incidieron en el aumento del costo de vida en la capital. En marzo la variación del subgrupo frutas se ubicó en 5.06% debido a los aumentos de precios de tomate de árbol, mango tommy, maracuyá y papaya.

El tomate de árbol alcanzó un precio por kilo de $2,300 durante marzo, dado que finalizaron las etapas de cosecha y se registró un menor volumen de ingreso en Corabastos procedente de Silvania, San Bernardo y Cabrera, Cundinamarca.

Con el mango tommy y el maracuyá sucedió algo parecido. En el caso del primero, se terminó la cosecha en Tolima y Cundinamarca, y se presentó un menor ingreso a la central de Corabastos. De igual forma, finalizó la fase de cosecha de maracuyá en el Valle del Cauca.

En el caso de los tubérculos, se registró poca oferta de papa en Bogotá, lo cual permitió un alza de precios de este producto. Para ejemplificar unos casos, disminuyeron las fases de producción de papa parda pastusa en Siachoque, Soracá, Toca y Ventaquemada en Boyacá. En otro ámbito geográfico, en Zipaquirá, Villapinzón y Subachoque disminuyó, de igual forma, la recolección de papa negra.

En contraste, algunas hortalizas y legumbres básicas de la dieta en la capital disminuyeron de precios. El aumento de la oferta de tomate chonto desde Pereira (Risaralda), Alcalá (Valle) y Anserma (Caldas) mantuvo su cotización a la baja, reflejados en una disminución de 13% en el mes. En este mismo grupo, la arveja verde presentó un buen nivel de abastecimiento, debido al mayor ingreso de este producto desde Pasca y Nemocón.

En lo corrido del año índice de inflación es 1.71%

En los tres primeros meses del año el índice de inflación de Bogotá se estableció en 1.71%, una tendencia alcista, si se contrasta con la misma variación del mismo periodo el año anterior (1.23%) y del mismo modo, por encima del registro a escala nacional (1.52%) y solo superado por Bucaramanga (2.09%). Por grupos, los alimentos, la vivienda y educación son los que más impactaron el costo de vida de los capitalinos.

Por el lado de los alimentos, la variación en lo corrido de enero y marzo fue 2.48%, siendo el principal subgrupo que con sus variaciones positivas desmejora el costo de vida en Bogotá.

El incremento en los almuerzos fue 2.56%. Las condiciones climáticas y la disminución de algunas cosechas han incidido en el alza de otras frutas frescas (23%) y la papa (20%) .

En el aspecto educativo, las alzas en lo corrido del presente año se deben a los ajustes presentados en las matriculas en febrero.

Por otra parte, el grupo vivienda presenta un alza en estos tres meses de 1.34%, que como se explicó antes, se debe a los ajustes positivos del precio de los arrendamientos. En este caso particular, el arrendamiento efectivo varió 1.06%, mientras el imputado varió 1.15%.

El único grupo que ha registrado variaciones negativas ha sido diversión. En este inicio del año este grupo varió -3.29%, debido a la disminución del gasto en algunos servicios de distracción, tales como planes turísticos y servicios de diversión.

Alza en alimentos afecta más a los bogotanos de ingresos bajos

Por nivel de ingresos, los ciudadanos que poseen una menor capacidad económica sintieron más el alza en los alimentos, arriendos y del grupo comunicaciones. La inflación para los ingresos bajos fue 0.46%, mientras que para los ingresos altos fue 0.08%.

Para la población de menores ingresos la variación del gasto básico en frutas fue 21% y en tubérculos y plátanos de 14%. En efecto, los sectores sociales de menor capacidad económica sienten más el impacto cuando productos básicos de su dieta alimentaria aumentan inusualmente de precios.

En el lado de las comunicaciones, este grupo varió para los ingresos bajos en 4.32%, producto del incremento en los servicios de telefonía en 5.17% , que responden al aumento mínimo tarifario de los planes básicos de telefonía local.

Los arriendos para el sector de ingresos bajos registraron un aumento de 0.75% (efectivo) y de 0.85% (imputado).

Inflación de bienes y servicios regulados y transables

La inflación sin alimentos para el mes de marzo en Bogotá fue 0.32%, cifra levemente superior al registro del mismo mes el año 2013 (0.30%), reflejo de una dinámica muy similar en este grupo a comienzos del año.

Para los bienes y servicios regulados, la variación en las cotizaciones en marzo fue 0.40%, obedeciendo a las mayores cotizaciones de las tarifas de gas (4.97%), bus intermunicipal (0.66%) y energía (0.26%).

Los bienes transables en marzo registraron una variación de 0.55%, muy parecido al registro de marzo 2013. Esta variación se debió a los cambios en las tarifas de servicio de telefonía (2.69%), y el precios de las ceras (1.89%), joyas en oro y plata (1.70%) y toallas (1.54%).

Dentro de los bienes no transables, la variación fue 0.14%. Las mayores variaciones positivas se debieron a las consultas de medicina general (1.6%) y especializada (1.41%).